miércoles, 29 de junio de 2011

Leyendas Urbanas

El día de hoy he estado muy interesada leyendo varias leyendas urbanas. Debo reconocer que varias de ellas me han impresionado y me han parecido bastante interesantes, pero algunas otras son de lo más estúpidas e increíbles. Todos alguna vez hemos leído, escuchado o contado alguna de ellas, desde la ya tradicional leyenda de "La Llorona" hasta la del Aserejé de las Ketchup. Algunas forman parte del folklor de algunos países y otras sólo son invenciones para llamar la atención, hacer dinero, distraer a las personas o mofarse de la ingenuidad de alguien.
Me llama mucho la atención como una historia puede ser contada de boca en boca y dar incluso la vuelta al mundo como el muy mencionado suceso de Ricky Martin y su fan con la mermelada en el programa español de "Sorpresa, Sorpresa". Y así cómo en el teléfono descompuesto, el verdadero relato se tesgiversa tanto que termina con una idea tan diferente de la primera. Pero la pregunta es: De todas estas historias y leyendas, ¿alguna de ellas tendrá una pizca de realidad? Es algo aterrador pensar que somos vigilados por potencias mundiales día y noche, que todo lo que pasa en el mundo son sucesos previamente planeados, que los vampiros y demonios existen, que los hombres de negro también existen y no son tan lindos como Will Smith y Tommy Lee Jones,  que alguna vez haremos contacto con seres de otras galaxias y lo peor que Marilyn Manson sea aquel nerdote personaje de "Aquellos Maravillosos Años". Se los dejo a su criterio. Salud!!!

martes, 21 de junio de 2011

Tabúes

Los Tabúes han existido desde tiempos inmemorables y se han referido a distintos temas como la religión, la política, la moral, la cultura, entre otros. A lo largo del tiempo han obedecido a diferentes fines, desde impedir que el conocimiento se esparza hasta ser parte de intereses políticos. Pero más que "ayudar a proteger a las personas de ciertas cosas" (como muchas veces se llegó a pensar), han retrasado el desarrollo intelectual de generaciones y propiciado que muchas cosas que obedecen al ciclo natural o que nos llenan de cultura se conviertan en algo malo y mal orientado. Los temas de sexo han sido de los más restringidos a lo largo de los años y cosas que hoy en día sabe un niño de la secundaria, hace veinte años eran temas prohibidos. Esto me trae a la mente una frase de William Shakespeare que dice "No hay cosas buena o malas, el pensamiento es el que lo hace". Y definitivamente nuestros pensamientos de dirigirán en la dirección que los queramos enviar. Es mil veces mejor estar informados y conocer los pros y los contras de ciertas situaciones a hacer las cosas sin saber y depués tener consecuencias nefastas o irreversible.
Afortunadamente las personas evolucionamos y empezamos a ver el mundo desde una perspectiva diferente, con una visión más amplia y enfocado a situaciones de avance. Definitivamente todavía hay una gran cantidad de personas que han optado por seguir con ideas obsoletas para estos tiempos, pero como en la selección natural, todo aquello que no se adapta al medio perece junto con su incapacidad para evolucionar.

jueves, 16 de junio de 2011

Nombres extraños

Últimamente he viajado mucho por la autopista y entre mis múltiples viajes he notado algo que definitivamente me hace interrogarme; ¿Por qué todas las personas que te cobran en las casetas tienen nombres tan raros? Ya hasta parece requisito para poder entrar a laborar en ellas.
Todo empezó cuando tomé mis primeros viajes, cuando llegamos a la caseta me di cuenta de que el nombre del muchacho que cobraba era Klaus. !¿Klaus?¡ Jamás había escuchado que un hombre se llamara así, al menos en México, y cada que pasaba por ese lugar me encontraba con el buen Klaus. Un día decidí poner atención en los nombres de las personas de las casetas y por alguna razón casi siempre leía nombres extraños como Wilfredo. Digo,  no es que Susana Margarita no suene a nombre de telenovela de Telerisa, pero hay niveles.
De verdad quiero saber si tener un nombre extraño es requisito para laborar en las casetas o si sólo fue mi percepción selectiva  (termino que conozco gracias a mi exquisito pointer). Pero bueno, creo que tooodos alguna vez nos hemos topado con alguien que tiene un nombre extraño. Manden su lista de nombres raros, tal vez me decida por uno de ellos para mi siguiente hijo, jajaja, naaa, es broma. Saludos a todos y por favor, cuando tengan un hijo piensen bien en el nombre que le pondrán, no sean gandallas.



miércoles, 15 de junio de 2011

El caos de la ciudad

Son las 12:21 a.m., ya es miércoles y me encuentro aquí escribiendo antes de dormir. Y es que no puedo ir a la cama sin antes comentar sobre lo caótica que es nuestra ciudad. El día de ayer había un caos vial por todos lados. Tardé una hora para salir de Lomas de Chapultepec, en realidad no sé que fue lo que pasó, pero por lo que sé el tráfico ya venía desde Mixcoac. La mayoría de personas que trabajamos invertimos demasiado tiempo en trasladarnos de nuestras casas a nuestros lugares de trabajo y a pesar de que terminamos acostumbrándonos, no deja de ser un desgaste el lidiar con el tráfico y con las presiones que de por sí ya tenemos en la chamba. Me parece sumamente curioso como es que todos estamos revueltos por todos lados y al final casi nadie trabaja cerca de dónde vive. Los del sur van al norte y los del norte van al sur.



Reconozco que la construcción del segundo piso del viaducto elevado ha sido de gran ayuda para muchos (incluyéndome), sin embargo hay un costo y definitivamente no todos tienen las posibilidades de pagarlo. Recuerdo que decía mi buen amigo George que era el puente del Dos mil diez porque dos mil van abajo y diez arriba, jajajaja. Y bueno, las construcciones viales siguen por todos lados, prometiendo que serán de gran ayuda (esperemos que sí), pero mientras causan más tráfico del que ya había y tal vez, como muchas cosas de esta vida, sus beneficios sean sólo para unos cuantos. Mientras tratemos de disfrutar nuestro camino, si es en carro que sea al lado de una buena compañía y si es en transporte público que sea con la lectura de un buen libro...

lunes, 13 de junio de 2011

El mal hábito de la impuntualidad

El tiempo, ¿qué es el tiempo en realidad?. Lo encontramos definido como:
"La magnitud que permite ordenar los sucesos en secuencias, estableciendo un pasado, un presente y un futuro, y da lugar al principio de causalidad, uno de los axiomas del método científico. El tiempo ha sido frecuentemente concebido como un flujo sucesivo de situaciones atomizadas."
Muchos autores han comentado que el tiempo no existe, que es relativo, otros más que es lo más valioso que poseemos, que el tiempo vale oro. Cada quien le da determinado valor a su propio tiempo de acuerdo a las actividades que tienen por realizar. En México, muchas personas (en su mayoría creo yo) tienen el mal hábito de la impuntualidad, cosa que suele ser de muy mal gusto cuando a nosotros nos toca ser los que esperamos.
Es comprensible llegar tarde cuando se presenta algún imprevisto ya que no siempre todo lo tenemos bajo control; pero los imprevistos son cosa de pocas ocasiones, cuando la gente hace parte de su vida llegar tarde entonces ya es una mala costumbre.
Recuerdo que en alguna ocasión cuando daba clases de Inglés en una empresa importante a nivel mundial, se encontraba un hombre muy irritado tratando de hablar con el personal de seguridad. Era un alto ejecutivo que tenía una cita con uno de los directores de la empresa, él era inglés así que las personas de seguridad me pidieron que les tradujera lo que el hombre decía. Acababa de volar desde Londres y tenía una cita muy importante con uno de los directores a las 9:30 a.m. y ya eran las 10:30 a.m. Muy molesto me miró y me dijo: "No quiero ser grosero pero en México tienen la mala costumbre de la impuntualidad, en Inglaterra hacer esperar a alguien una hora es una falta de respeto que no se puede tolerar".
Traté de calmar al hombre y le sugerí que tomara asiento, sin embargo me hizo pensar que no importaba que tan lejos estuviera Inglaterra porque hasta allá llegaba nuestra fama de la impuntualidad.


domingo, 12 de junio de 2011

Fantasias

La imaginación es una herramienta muy poderosa. Puede ser nuestra mejor amiga o la peor enemiga, todo depende de como sea usada. Con ella podemos crear o destruir; puede llevarnos a cualquier lugar en cualquier situación o momento. Pero la pregunta es: ¿De que manera la usamos en nuestras vidas?; puede ser nuestra mejor amiga a la hora de estar en la cama, a la hora de crear,de escribir, de leer. Sin embargo también puede ser muy mala si además de imaginación le sumamos desconfianza, miedos, celos. Es por eso que todo cuanto está en nuestro alrededor tiene dos perspectivas y ellas están en el ojo de quien las mira o en la mente de quien las crea. Yo me reservo mi imaginación para la lectura, la escritura y por su puesto para los momentos de cama ( o cocina, baño, sala, oficina, cualquier lugar es bueno...)